Los bufones son quizás la maravilla natural más espectacular que ofrece nuestra querida tierra, Asturias. Palabras mayores… Vamos a acercarnos a un curioso y espectacular fenómeno natural, que se puede disfrutar con determinadas condiciones marinas.
Te proponemos visitarlos de diferentes formas, en los tres lugares con bufones que han sido declarados Monumento Natural. Y sentirlos, porque el ruido pone la carne de gallina. Un plan potente e hipnótico que no defrauda a nadie que lo ve.
Qué son los bufones de Asturias
Para entendernos, los bufones son una especie de géiseres costeros que se pueden ver en en el oriente asturiano, donde el agua se cuela por las grietas de las rocas de los acantilados costeros.
Estas hendiduras son generadas por el mar Cantábrico y la lluvia que, poco a poco, erosiona la roca hasta formar estas chimeneas, que conectan la base del acantilado con su parte superior.
Cuando las olas baten el acantilado, comprimen violentamente el aire y el agua presente en las grietas, que busca una salida originando este bonito, violento y curioso fenómeno.
Los bufones pueden expulsar el agua incluso a más de 20 metros de altura y son muy espectaculares. Y no solo visualmente, su bufido de fuerza de la naturaleza desatada intimida mucho.
Cuándo se pueden ver los bufones. Condiciones necesarias
El invierno es la época del año en la que más se pueden ver los bufones, por ser cuando se generan las condiciones más favorables, pero en realidad pueden surgir en cualquier época del año.
Los requisitos óptimos para poder disfrutar de los bufones en todo su esplendor son:
- Fuerte marejada, cuanto más mar de fondo mejor.
- Marea alta, aunque con el suficiente mar no es imprescindible. Los hemos visto y oído en marea baja, pero con tremendas olas.
Además de estos dos, hay otros factores que intervienen pero su efecto es más difícil de predecir e interpretar: coeficiente de mareas, dirección del mar, viento… Esto explica el hecho de que, en ocasiones, el mejor día para disfrutarlos no sea el que más mar hay.
Hemos visto bufar varias veces con diez metros de mar de fondo y aquello es una salvajada. Toma nota: cuanto más mar de fondo, tanto mejor para verlos y más alucinarás.
Por el contrario, si el mar está en calma, o no está lo suficientemente bravo, por las chimeneas tan solo sale un poco de aire, que se puede escuchar o no.
¿Hay bufones en verano?
Seguramente no, en verano el mar tiende a estar en calma. Imposible no es, también hay sistemas de bajas presiones en verano, pero son menos frecuentes y potentes.
Los Bufones de Pría
Los más famosos (y masificados) se encuentran en Llames de Pría. Y no es de extrañar, hay muchos bufones y muy grandes. Gozarás de un impresionante paseo por acantilados y, si tienes suerte, podrás ver decenas de ellos bufando a la vez.
Ruta de los Bufones de Pría
Si te gusta pasear, está la senda denominada Ruta de los Bufones de Pria, PR AS-57. Desde Llames, son unas 4 horas de duración y dificultad baja. Merece la pena disfrutar de este espectáculo extremo de la naturaleza en un día de mar bravo, vives (y sientes) los bufones al lado mismo.
No tienes porque hacer la ruta al completo ni mucho menos, al poco de llegar ya ves buenos ejemplares.
Los bufones de Pría desde el área recreativa de Guadamía
Desde el área recreativa de Guadamía se tiene otra perspectiva, más lejana pero no menos espectacular, ofreciendo una panorámica inigualable de los bufones más potentes.
Cuando bufan de verdad, es el mejor balcón para deleitarte con ellos.
Como llegar a los Bufones de Pría (y aparcar)
Hay que llegar al pueblo de Llames de Pría, donde puedes dejar el coche si no hay mucha gente. De ahí a la playa de Guadamía y los bufones tienes un paseo de 5 o 10 minutos.
La siguiente opción para aparcar es el aparcamiento de Llames, a 900 metros de la playa de Guadamía.
Si te acercas al área recreativa de Guadamía, que sepas que el parking que hay es pequeño y la carretera estrecha.
Restaurantes cerca de los Bufones de Pría
Si comemos en la zona solemos ir a Casa Antón, en Cuerres (al lado). Comida tradicional muy rica que te recomendamos.
Hoteles cerca de los bufones de Pría
Con la playa de Guadamía al lado, Llames de Pría es una opción muy interesante durante todo el año, especialmente en verano y en días de Bufones. Lista de alojamientos aquí.
Pero si quieres comparar varios alojamientos en Asturias, en este artículo te ofrecemos opciones que nosotros mismos conocemos y en donde hemos pernoctado: dónde dormir en Asturias.
Los Bufones de Arenillas
Muy cerca de Puertas de Vidiago, el paisaje que nos rodea es espectacular, a un lado las montañas y al otro el mar Cantábrico con sus acantilados. Por algo Asturias es Paraíso Natural.
Si estás dudando dónde ir, que sepas que es más fácil ver funcionar los Bufones de Arenillas que los de Pría.
Como llegar a los Bufones de Arenillas (y aparcar)
Ponemos rumbo a Puertas de Vidiago, dónde nos lleva la N-634, que dejamos para atravesar un paso a nivel y coger una carretera, muy estrecha, que nos lleva al pueblo. Hay señales que indican un camino que pasa por encima de la autovía del Cantábrico, para llegar a un pequeño aparcamiento al lado de la zona de acción.
Este camino tiene unos cuantos baches y es apto para un vehículo, así que habrá que apretarse y apañárselas para pasar cuando venga alguien en dirección contraria. Si vas desde Puertas de Vidiago, el paseo es de menos de 2 km. Si hay mucha gente, seguramente caminar sea la mejor opción, el camino es muy estrecho y puedes perder mucho tiempo a pocos coches que se junten.
Restaurante cerca de los Bufones de Arenillas
Otro aliciente para ir a estos bufones es abrigarte una muy buena comida en el restaurante Casa Poli, totalmente recomendado. Hemos ido no menos de 4 veces. Nuestra experiencia aquí:
Hoteles cerca de los Bufones de Arenillas
La zona nos gusta, por las vistas y porque cerca hay bonitas playas. Perfecta para una escapada rural con caminata por los bufones. Opciones en Vidiago aquí.
Los Bufones de Santiuste
Al igual que el resto están en el municipio de Llanes, entre Buelna y La Franca, señalizados accediendo por la N-634. Considerado el más espectacular ya que puede llegar a impulsar el agua a 40 metros de altura. Aún se nos resiste, así que añadiremos información en poco tiempo.
Cómo se formaron los bufones
Se sitúan en unas zonas concretas de la costa oriental asturiana, cerca de Llanes donde hay unas características geológicas especiales.
Con el paso del tiempo, la roca caliza de la zona se ha ido descomponiendo con la actuación de la lluvia, erosionando la roca, poco a poco, hasta llegar al mar a través de pequeñas grietas.
Éstas, a su vez, han ido aumentando de tamaño debido a la presión ejercida por la fuerza constante del Cantábrico. Finalmente, el proceso termina con la formación de una cueva, en la que el oleaje comprime agua y aire, que son expulsados verticalmente a gran presión por las grietas, convertidas en chimeneas.
Los peligros de los bufones
Recomendamos ser prudentes y precavidos, nunca subestimar la fuerza de la naturaleza, los peligros aquí son muy reales. Ya se ha producido alguna muerte por acercarse demasiado al bufón cuando brama, que ha lanzado al individuo varios metros hacia arriba con una posterior caída fatal.
Algunos consejos:
- Cuidado con acercarse a los bordes de los acantilados. Parecen muy altos pero las olas los pasan por encima como si nada.
- No asomes la cabeza para ver que hay en un bufón.
- En campos de bufones, como en Pría, camina con mucha precaución fuera de los senderos. Algunos bufones son enormes cavidades, pero hay un buen número de ellos muy pequeños, que pasan inadvertidos hasta que te dan un buen susto bufando muy cerca de ti.
- Cuidado con el viento. No es prudente ir con fuertes rachas, además no lo disfrutarás, mucho menos si llueve.
- Si vas con niños, mucha atención y no les quites ojo.
Parecen cosas de sentido común, pero nos sorprende la cantidad de gente que realmente no es consciente del peligro al que se expone. Y es que, para hacer la mejor foto tienen que acercarse al borde del bufón y asomar su cabezota, incluso con niños pequeños. Normalmente, al primer bufonazo se les cambia la cara (literal), y suele pasar de soy el más listo a cara de tonto asustado…
No podía faltar una leyenda
La gente del lugar cuenta que parece ser que había un Cuélebre (personaje mitológico asturiano parecido a una serpiente con alas, cuya principal función es vigilar personajes encantados y tesoros). Vivía olvidado en la costa y sus bufidos y rugidos parecía ser, eran estremecedores.
Una doncella se sintió cautivada e interesada por aquellos ruidos. El cuélebre la vió entre la niebla y se quedó prendado de la mirada de la joven, por lo que al momento se convirtió en un apuesto caballero. Mientras se abrazaban, el padre de la joven los vio y, embriagado de furia y rabia, los arrojó violentamente por el acantilado.
Como castigo al verdugo, los profundos quejidos de los bufones retumban a kilómetros de distancia y así nace la leyenda de “los lamentos eternos del mar”.
Finalmente si después de este paseo por Asturias quieres conocer más lugares maravillosos del Paraíso Natural, accede a otra de nuestras publicaciones en este link: De ruta por Asturias: Conociendo Somiedo con la ruta Valle del Lago.
Una última reflexión
Por suerte o por desgracia, es relativamente complejo verlos en plenitud, al requerirse ciertas condiciones ajenas al factor humano para que bufen.
Quizás sea mejor así. Si los bufones estuvieran en plenitud las 24 horas, se convertiría su visita en una auténtica romería, como ha pasado en lugares como la famosa Playa de las Catedrales en Galicia, o la bonita ermita San Juan de Gaztelugatxe (Rocadragón de Juego de Tronos), donde han tenido que regular las visitas. Aun así, ten en cuenta que si vas en fin de semana es probable que te encuentres mucha gente, así que mejor ir durante la semana laboral, si se puede.
2 comentarios
Todo eso q cuentan está muy bien, si da la casualidad de que te toca un día de temporal, pero la realidad es que solo ocurre muy de vez en cuando. Y en verano, después de muchos intentos, nunca los hemos visto bufar, y es decepcionante.
Hola Marisa, gracias por tu comentario. Es verdad que en verano no suele haber temporales, se hacen de rogar y no suelen bufar, pero imposible no es, hay días con mar de fondo suficiente (pocos, cierto). Lo ideal es visitarlos entre octubre y marzo y aún así nadie asegura el poder verlos. Los Bufones de Arenillas son quizás los más fáciles de ver y necesitan menos mar para funcionar. Si tienes la suerte de poder verlos merece la pena, impresionan. Si quieres más info escríbenos un mail a animalesviajerosblog@gmail.com y te damos alguna web donde mirar la previsión para no ir a ciegas la próxima vez, aunque no es algo matemático.