Bienvenidos al Cabo Peñas, el punto más septentrional de Asturias, donde el verde se diluye en el azul infinito del Cantábrico. Te proponemos descubrir la zona con una pequeña ruta, casi un paseo: conocerás su faro y los agrestes acantilados, sus islas y, si hay suerte verás hermosas aves marinas. Además, es un plan perfecto para el verano: la playa de Verdicio está a escasa distancia, así que te puedes acercar a darte un baño y tomar algo en el chiringuito.
Dónde está el Cabo Peñas
En el norte de Asturias. Ya sabes, es la parte más septentrional del Principado y está en el concejo de Gozón.
Por su situación en la zona centro de Asturias, el Cabo Peñas es bastante accesible y es una zona relativamente visitada, tanto por asturianos como por viajeros. Desde Oviedo tienes 45 minutos, 30 desde Gijón y algo menos desde Avilés.
Dónde dormir
Si buscas alojamiento por la zona del Cabo, te recomendamos dos opciones diferentes.
Una casa rural en Bañugues, en plena naturaleza:
Si eres más de ciudad, Avilés y Gijón son las más cercanas. Si te quieres dar un homenaje aquí te dejamos dos pedazos de hoteles:
Dónde aparcar
Hay dos aparcamientos que en meses de verano y temporada alta se llenan fácilmente:
- Justo al lado del faro del Cabo de Peñas hay varias plazas.
- Unos metros más allá del anterior, al lado del restaurante Cuatro Vientos.
El Cabo Peñas
La costa asturiana ofrece paisajes espectaculares y este es uno de los más llamativos, una zona de abruptos y espectaculares acantilados. Parte del Cabo Peñas, entre la península de Nieva y La Punta la Vaca (incluida La Isla Erbosa), pertenece desde 1995, por su alto valor medioambiental), a la Red Regional de Espacios Naturales Protegidos (RRENP).
Dentro de este Paisaje Protegido encontramos acantilados, islotes y playas con un alto valor paisajístico, pero también ecológico. ¿Sabías que el espacio marino del Cabo Peñas es un corredor migratorio para las aves? La proximidad del cañón de Avilés hace que esta zona tenga una elevada productividad y haya más de 15 especies de aves marinas. Se calcula que durante la migración del otoño el flujo migratorio supera el millón de aves.
El Cabo Peñas también se integra en la Red Europea de espacios Protegidos, la llamada Red Natura 2000. En 2003 se incluye también en la lista europea de Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), con el fin de dar protección especialmente a las aves migratorias.
El Faro de Cabo Peñas
Activo desde 1852, hoy día acoge en la planta baja el Centro de Interpretación del Medio Marino de Peñas, donde hay salas que muestran diferentes temáticas.
Muchas son las tragedias que ha vivido este faro, y es que se ha sido testigo del hundimiento de un número respetable de barcos, con la consecuente pérdida de vidas. Por desgracia, los sustos aquí son habituales.
Qué hacer en Cabo de Peñas
Disfrutar del entorno es el principal aliciente. Sitio privilegiado en plena naturaleza, donde se respira mar y paz. El contraste del azul del mar con el verde del litoral, la brisa marina (o viento huracanado, según el día), los brutales acantilados martilleados incansablemente por el Cantábrico, las gaviotas que quieren comerse tu bocadillo y muchas más emociones marinas te esperan.
Te aconsejamos esta cortísima ruta para conocer y disfrutar del lugar, que merece la pena. Eso sí, cuidado con las condiciones de mar y viento, siempre hay que extremar las precauciones.
Características de la ruta
DISTANCIA: 4 kilómetros aproximadamente.
DESNIVEL POSITIVO: 30 metros.
DESNIVEL NEGATIVO: 30 metros.
INICIO Y FIN: Parking del Cabo de Peñas (concejo de Gozón, Asturias).
TIEMPO TOTAL: es un paseo muy corto, el tiempo dependerá fundamentalmente de lo que dediques a tomar fotos o contemplar el paisaje. Puedes hacerla en una hora tranquilamente.
TIPO DE RUTA: circular.
SEÑALIZADA: parte de la ruta que aquí se muestra pertenece a la PR AS-25.
DIFICULTAD: fácil. No hay casi desnivel.
NIÑOS: el inconveniente son los acantilados, mucho ojo con ellos. Cada uno sabe la capacidad de los niños que están a su cargo.
ADAPTADA: la primera parte del paseo (unos 400 metros desde el aparcamiento) son tablas de madera, pero la exposición a los elementos les ha dado martirio y, hoy día, no están muy bien conservadas.
BICILETA: no está adaptada para bicis.
Ruta o paseo del Cabo de Peñas
Salimos desde el mismo parking y avanzamos con el faro a nuestro lado. Al principio tenemos una pasarela de madera donde hay paneles informativos sobre la fauna, geología y flora de la zona, que ayudan a entender e interpretar el Cabo de Peñas y su entorno.
La zona es un espectáculo, lo primero con lo que te encuentras es la Peña y la Isla de La Gaviera, y la cosa va mejorando con los diferentes puntos de vista según caminas.
Seguimos por el caminito de tablas y llegamos a una curiosa estructura con unos altavoces. No es otra cosa que la sirena del faro del Cabo Peñas, que ponen en funcionamiento en caso de niebla.
Una vez finalizan las tablas comienza un sendero fácil, entre arbustos y piedras, que recorre la costa. Recuerda que es una zona de abruptos acantilados, hay que mantener la sensatez y precaución necesaria.
Siguiendo la senda vemos playas prácticamente inaccesibles por tierra, como la Playa el Sabín, muy característica con su pequeño islote Agudo del Sabín.
Cuanto más se avanza, mejor se distingue la Isla Erbosa (a unos 750 m. de la costa), acompañada por el Islote El Bravo, 200 metros las separan.
Esta zona del litoral asturiano la recorres en un momento y llegas a la parte más occidental del Cabo, donde esperan bonitas panorámicas del occidente asturiano.
Pasamos una zona húmeda que puede tener lagunas después de lluvias para llegar al edificio de Telefónica. Aquí hay que decidir si volver por el mismo camino o por el interior. O también puedes acercarte a la playa de Verdicio; eso sí, el paseo se alarga considerablemente: del edificio a la playa habrá entre 4 y 5 km, solo la ida.
Nosotros volvimos por dentro, sales a una carretera sin apenas tráfico al lado del edificio. Camino más rápido, pero también mucho menos interesante.
Cuándo hacer la ruta del Cabo Peñas
La verdad que cualquier época es buena. El otoño es la mejor época para disfrutar de la migración de las aves, mientras que el invierno tiene el aliciente de presenciar la furia del Cantábrico… Y de hacerla en verano, vemos muy interesante la opción Verdicio.
Track de la ruta
Aquí tienes nuestro track. La verdad que la caminata es fácil y no hay posibilidad de pérdida, pero puedes echarle un ojo aquí.
Conclusiones y recomendaciones
- Si no tienes tiempo o no te apetece hacer la ruta completa, recomendaríamos hacer al menos las tablas de madera del inicio, son solo unos 500 metros.
- Si tienes suerte verás aves, aparte de gaviotas, claro. Llevar unos prismáticos puede ser buena idea.
- No es necesario un calzado de monte específico (recomendable, eso sí, con barro), pero lleva al menos un calzado deportivo.
- Lleva algo de ropa de abrigo, el viento y la humedad es la norma.
- Respeta las señalizaciones, mucho ojo con los acantilados y las fuertes olas.
- Prohibido el uso de dron al ser una zona protegida.
- En temporada de lluvias es fácil que encuentres algo de barro y charcos (fuera de las tablas de madera del principio).