Macizo Oriental de Picos de Europa… ¿os suena?, ¿habéis estado? Suele ser la zona menos conocida del Parque Nacional de los Picos de Europa, pero esto no significa que ofrezca menos oportunidades para aquellos que disfrutan de la montaña.
CONTENIDO DEL ARTÍCULO
Dónde se encuentra el Macizo Oriental de Picos de Europa
Picos de Europa se sitúa en la Cordillera Cantábrica y se distribuye entre Asturias, León y Cantabria. Picos está subdividido en tres macizos.
El Macizo Central y Occidental son los más visitados; Naranjo de Bulnes (Picu Urriellu), Lagos de Covadonga, son auténticos emblemas del parque. El Macizo Oriental, de Ándara, es sin duda, la zona menos conocida.
La ruta que os describimos en esta publicación, de las minas y el Lago de Ándara, a la que se accede desde el Jito Escarandi, pasando por el Casetón de Ándara, se sitúa en la zona cántabra del Macizo Oriental.
Macizo Oriental
El Macizo de Ándara tiene formaciones más suaves (menos verticales) y con menos altura, su máxima altitud es en la Morra de Lechugales con 2.444 metros, que no está mal. Pero no por ello es menos bonito. Es más, estas características del Macizo Oriental que quizá no sean las más idóneas para unos, son toda una posibilidad para animarse a visitarlo para otros.
Historia
En este Macizo se produjo una frenética actividad minera en los siglos XIX y XX. A lo largo de la ruta podrás ver restos de construcciones, herramientas y bocaminas. En esta zona de Ándara, hubo 3 focos mineros conocimos como la Providencia, la Mazarrasa, y Evangelista.
Nuestros guías
Esta ruta la hicimos en grupo, con nuestros compañeros de Asturias Travel Bologgers, y en la que también participaron amigos y seguidores de la asociación.
La ruta fue organizada por Silvia y Sergio de MSS Mountain, una empresa de trekking, que realiza salidas a la montaña. No nos olvidemos de Yim, un perro súper majete que también forma parte de este equipo, y es que MSS Mountain también realiza salidas con perros.
Nos plantearon una ruta para todos los públicos la cual fueron adaptando a las necesidades del grupo. Nos explicaron por donde íbamos caminando y nos dieron unas pinceladas de la historia del lugar, la vida de los pastores, sus curiosidades y las leyendas de la zona. Nos trataron con todo el cariño del mundo y fueron muy profesionales en todo momento. Os animamamos a que cotactéis con ellos si os apetece hacer una ruta con guías, no os arrepentiréis.
Macizo Oriental de Picos de Europa. Ruta de las minas, refugio y Lago de Ándara
Características
Longitud: 9 kilómetros
Tiempo: unas 4 horas y media. Todo depende de las paradas que realices. Media hora más parando a comer.
Desnivel: 600 metros
Dificultad: baja, tan solo aumenta un poco el esfuerzo si subimos por la canal.
Bici: si tanto la ida como la vuelta la haces por la pista, puedes ir con bici de una manera bastante cómoda. Nos encontramos con varias personas disfrutando de este deporte.
Niños: lo primero decir que depende de los niños, su costumbre de caminar, y su actividad física, pero se puede realizar con niños de una cierta edad.
Recorrido
Una vez pasado Sotres, en Asturias, a unos 3 kilómetros y medio accedes a Jito Escarandi, donde hay un parking. Cuando nosotros llegamos, a las 9 de la mañana de un domingo de julio, estaba completo. Tuvimos que estacionar el coche no del todo correctamente (ten siempre cuidado de no dejar a ningún coche inmovilizado o de no taponar ningún camino).
Comenzamos a caminar por la pista que sale a la derecha del aparcamiento en Jito Escarandi, con buen firme, ancho y bien señalizada. Si miramos al otro lado de la carretera se contempla la Majada del Hoyo del Tejo.
Desde aquí hay aproximadamente una hora y media hasta el Refugio de Ándara a unos 1.700 metros de altura (antiguo casetón minero). Poco tiempo después de empezar caminar se llega a la Majada de la Jazuca, con vistas a algunas casas de pastores, y es ahí donde puedes seguir la ascensión al casetón por la pista. O bien como hicimos nosotros: dejar la pista y descender hasta esta majada para iniciar el ascenso al casetón por varias canales.
Aquí se inicia una subida por un sendero serpenteante, adentrándote en la Canal de la Jazuca. Siempre tendremos en nuestra vista izquierda, si no hay niebla, el Pico Mancodiu, con 1.999 metros.
Poco a poco, accedemos a la Canal de las Vacas, un tamo de pedrero, en donde si miras atrás puedes ver el camino cómodo por el que nosotros decidimos no ir. Seguimos caminando con el Pico Mancodiu a nuestra izquierda, prácticamente por su pared.
Por este pedrero se ve perfectamente como la mano del hombre ha modificado el lugar, ya que aún se conservan restos de muros o terrazas, que se construyeron para poder subir y bajar carros y bueyes a las minas.
Y así, poco a poco, llegamos al Refugio “Casetón” de Ándara. Alrededor de él, se sitúan varias bocaminas y una vagoneta en la entrada a una de ellas. También se ven escombreras de las minas en las que se explotaron metales como el zinc. La falta de rentabilidad y las duras condiciones del invierno provocaron que cerrasen entre 1930 y 1940.
Por la izquierda del Refugio iniciamos otra pequeña ascensión, por un camino de piedra pero bien marcado por el que se llega al Collado de la Aldea, donde se forma una charco que toma el color del hierro. Desde aquí ya estamos muy cerca del Pozo de Ándara, en dirección al pico Valdominguero.
Donde hoy pastan las vacas, estaba el Lago de Ándara. Dicen que podía tener hasta 15 metros de profundidad. Por desgracia, la actividad minera provocó en 1911 que el agua se filtrara por una grieta que hizo que el lago se secara en unos pocos meses, probablemente por una voladura mal calculada. Era junto al Lago Enol y el Ercina uno de los grandes lagos de Picos de Europa.
Rodeando lo que fue el lago llegas a la Majada del Redondal, en la que continuamos viendo la mano del hombre; hay más de 40 refugios de pastores hechos con piedra, aprovechando las laderas de las montañas. Es un lugar perfecto para tomar energías y comer los bocadillos. Silvia y Sergio, nuestros guías, nos dijeron que se rumorea, que un pastor sigue viviendo en esta zona, pero al menos ellos, nunca lo han visto.
Atravesando un riachuelo llegas a una bocamina, a la que entramos (bajo tu cuenta y riesgo, hazlo de manera cuidadosa y prudente). En su entrada aún se ven los raíles de las vagonetas y si caminas unos metros llegas a la mina, donde increíblemente, hay un nevero; un enorme bloque de hielo sobreviviendo en pleno julio.
Volvimos sobre nuestros pasos hasta el Casetón, lugar ideal para hacer otra parada y refrescarte con alguna bebida fría. Esta vez en lugar de bajar por la canal, descendimos por la pista, una manera mucho más cómoda pero menos amena. De esta forma, en aproximadamente una hora desde el Refugio estábamos en el parking.
Conclusiones y recomendaciones
Sobre todo si se va en verano: el sol pega muy duro y no hay casi sombra. Recomendable llevar crema solar de alta protección y una gorra o pañuelo no está de más.
No es una ruta exigente, pero calzado y ropa siempre hay que llevar el adecuado para la montaña, e incluso no está de mas tener algo más de ropa en la mochila por lo que pueda pasar.
Muy importante el no dejar huella en la naturaleza, así que toda la basura que se genere, ¡a la mochila!
Llevar comida y bebida siempre. Aunque en el Casetón de Ándara puedes comprar de comer o beber, no está abierto todo el año, y aún así siempre hay que ir con reserva.
En el parking, cuidado con los coches, deja tus retrovisores bien plegados. Al menos cuando fuimos nosotros, las vacas campan a sus anchas entre los autos y pueden llevarse algún espejo por delante.
Si os gusta el queso, estáis de suerte, en el pueblo de Sotres, hay un gran número de cuevas donde se madura el “Quesu” Cabrales (con Denominación de Origen Protegida), por lo que también hay muchos puntos para su venta. No es un queso barato, pero si os gusta el queso fuerte, esto es puro placer.