Y así empezó todo, la historia de este viaje comienza mientras nos cambiábamos en el vestuario para empezar el entrenamiento de balonmano.
– Menudo año se está pegando Julia de Erasmus -mencionó Sandra.
– ¿Qué está en Polonia, no? -pregunté yo (Natalia) olfateando una buena escapada.
– Si si, todo el curso, hasta Junio -confirmó Paula.
– Pues, podíamos ir a verla, ¿no? -dijo Sandra.
– ¿Vamos?
– ¡Vamos!
En un minuto estaba decidido, mis colegas Sandra, Paula y yo misma nos íbamos a ver a Julia a Polonia. A los pocos días, ya habíamos comprado los billetes de avión, de ida a Cracovia y vuelta desde Varsovia, y reservado los apartamentos para 4 personas en ambas ciudades.
Iba a ser una visita un poco exprés, ya que tan solo nos encajaban dos noches en cada ciudad, pero conseguimos aprovechar muy bien el tiempo. Obviamente si podéis estar algún día mas no lo dudéis, pero con dos noches llegas a recorrer bien Cracovia y Varsovia y sus lugares más emblemáticos. No son ciudades excesivamente grandes, Cracovia no llega al millón de habitantes y Varsovia no llega a los dos millones.
Nuestra primera parada fue Cracovia, su centro histórico fue declarado Patrimonio Mundial en 1978, una ciudad encantadora y de las más antiguas de Europa. No esperaba mucho ni poco, pero me fascinó. Ofrece una amplia variedad de atractivos, es uno de esos lugares de los que cuando te vas, sabes que volverás. Si quieres obtener más información de Cracovia accede a nuestro artículo en el siguiente enlace, qué ver en Cracovia.
Día 1
Aterrizamos en el aeropuerto Internacional Juan Pablo II, también conocido como Cracovia Balice donde nos esperaba una furgoneta que habíamos acordado con el alojamiento con un coste de 90 PLN, unos 21€, seguro que con transporte público es mucho más barato, pero nos pareció muy cómodo disponer de una furgoneta privada del aeropuerto a la puerta de nuestra morada.
A nuestra llegada a Cracovia (Krakóv), nos estaba esperando la mejor anfitriona que podíamos haber tenido: Julia, que se desplazó desde Wroclaw, donde estaba de Erasmus, para ser nuestra guía en Polonia.
Subimos al apartamento que habíamos reservado en el centro de Cracovia, Apartments-Old Town, a dejar las maletas, y fuimos gratamente sorprendidas.
Era un alojamiento TOP, perfectamente situado (ul. Garncarska 3/4, Centro histórico, 31-128 Cracovia), muy limpio, caliente y acogedor, parecía a estrenar, pero lo mejor de todo el precio, ¿sabéis cuanto pagamos entre las 4 por dos noches? 300 zloty, unos 72€. I LOVE POLSKA.
¿Increíble verdad? 18€ por persona, por dos noches en un alojamiento de 10. Solo un detalle a tener en cuenta y es que hay que cerrar las puertas con llave, ya que si la cierras con el resbalón, se pueden abrir desde fuera, parece que es algo común en el país.
Puedes reservar desde el siguiente enlace: Apartamentos Old Town.
Dejamos los bultos y nos fuimos a cenar, ya era tarde, no había tiempo que perder y nos dirigimos al Gospoda Koko, lugar auténtico, muy recomendable y barato 54 zlotys, unos 13€ entre las cuatro personas, accede a más información pinchando aquí: Dónde comer en Cracovia.
Después de disfrutar del homenaje, decidimos irnos al apartamento ya que se nos había hecho algo tarde, llevábamos todo el día de viaje y tocaba madrugar para ir a visitar Auschwitz.
Día 2
El despertador sonó a las 6:45 a.m. A pesar de lo poco que habíamos dormido, nos levantamos con mucha energía ya que era el momento de conocer Auschwitz, uno de los lugares indispensables en nuestra visita a Polonia. Y no nos defraudó, es increíble y no nos dejó indiferentes.
Auschwitz merece especial atención y por ello hemos creado dos artículos. En el primero detallamos como organizar tu visita, accede al siguiente enlace: Todo lo que necesitas saber para ir a Auschwitz. En el segundo relatamos la visita en sí y nuestras conclusiones: La impactante visita al campo de Auschwitz.
Volvimos a Cracovia sobre las 2 de la tarde, la hora perfecta para tomarse algo antes de ir a comer, fuimos a un bar cualquiera del centro y, ¡Ohhhhh Sorpresa! Disfrutamos de unas pintas, entorno al medio litro de cerveza, que al cambio nos costaron cada una 1€, increíblemente barato.
Saciada la sed decidimos ir a comer al Babci Maliny, otro restaurante auténtico, económico, 83 zlotys unos 20€ entre las cuatro y más que recomendable, pincha en el siguiente enlace para saber más sobre el Babci Maliny: Dónde comer en Cracovia.
Finalizada la comilona, teníamos toda la tarde por delante, así que pusimos rumbo al Castillo y catedral de Wawel, pero antes nos dimos una vuelta por la preciosa Plaza del Mercado, Rynek Glówny, es realmente espectacular, de las más bonitas que hemos visto.
Si quieres información sobre lugares que has de visitar en Cracovia accede a nuestro artículo pinchando en el siguiente enlace: Qué ver en Cracovia.
El paseo hasta Wawel se hizo corto, caminas entre calles bonitas llenas de vida, el centro de Cracovia es chapó.
Y poco a poco vas viendo acercarse el Castillo que se alza imponente en lo alto de la colina. El paseo es precioso, recorres el castillo, muralla y su catedral. Además disfrutarás de unas vistas increíbles al río Vístula. Finalmente fuimos a ver el famoso dragón que cada pocos minutos echa fuego por la boca.
Después de la visita a Wawel y de llevar todo el día pateando la increíble ciudad de Cracovia ya tocaba reponer energías, así que era hora de merendar, picamos algo en una cervecería cualquiera, 3 cervezas, un agua y dos de patatas bravas fueron 20 zlotys unos 5€. Repuestas las fuerzas, callejeamos durante un ratito más hasta que se hizo la hora de cenar, y esta vez aconsejadas por nuestra anfitriona Julia acudimos a Pod Wawelem, un lugar elegante, en el que cenamos las 4 por 111 zlotys unos 26€ entre las cuatro, 6,5€ por persona, acostumbradas a otros restaurantes parecía que estábamos tirando la casa por la ventana. Para obtener más información del restaurante visita nuestro artículo de dónde comer en Cracovia.
Finalizamos la noche en el Pijalnia, una cadena de bares muy conocida en el país, donde puedes ir a tomarte un trago y pasártelo bien, sus precios son muy populares, y es famosa su extensa carta de chupitos, la cual probamos entera (es necesaro catar las cosas para poder opinar jeje).
Incluso hay una pequeña carta para poder picar algo, como por ejemplo un steak tartar por el increíble precio de 12 zlotys, unos 3€.
Con el buche lleno y bien saciada la sed, nos fuimos a descansar al apartamento, había sido un día largo y nos esperaba otro que no se quedaba corto.
Día 3
A la mañana siguiente nos íbamos de Cracovia para poner destino a Varsovia, disfrutamos de un último desayuno en esta encantadora ciudad y caminamos hasta la estación de autobuses.
Habíamos comprado los billetes hacia unos días por internet con la compañía Polskybus, el coste fue de 16 zlotys, al cambio 4€ por persona, por un trayecto de 370 km y unas 5 horas de duración. Si, si, has leído bien, 4€ por persona en un bus con conexión a Internet, baño, asientos de cuero y enchufe en cada asiento, ¿se puede pedir más? Aquí tenéis el enlace a esta línea de autobuses tan molona: http://www.polskibus.com/en/index.htm
Y así termina nuestro paso por Cracovia, una ciudad que nos enamoró, superó nuestras expectativas con creces, y nos dejó con ganas de más.
Para profundizar un poquito más sobre qué hacer y qué ver, accede a al siguiente artículo: Qué ver en Cracovia.