Jordania es conocida y visitada por muchas razones: su oferta cultural es impresionante, la gastronomía es buena, los paisajes del Wadi Rum, el mar Muerto…pero, por encima de todos los tesoros jordanos, y a mucha distancia de los demás, está la antigua ciudad de Petra (la Ciudad Rosada).
CONTENIDO DEL ARTÍCULO
- Porqué ir a Petra
- Principales monumentos en Petra
- ¿Cuántos días para visitar Petra?
- Lo que necesitas saber para tratar con los beduinos de Petra
- Cuánto cuesta la entrada a Petra
- Horario de visitas en Petra
- La historia de Petra
- Dónde dormir
- Cuándo ir a Petra
- Cómo llegar a Petra
- Qué necesito llevar
- Dónde comer en Petra
Porqué ir a Petra
A día de hoy, Petra es casi un lugar de peregrinación para el viajero moderno. Somos de la creencia de que se debería visitar Petra una vez en la vida (al menos). La magnitud de lo excavado en la roca hace 2.000 años, deja sin palabras y habla a las claras de la importancia y riqueza de esta antigua ciudad.
Lo que perdura de esta antigua ciudad nabatea han sido fundamentalmente las míticas fachadas y construcciones, horadadas en las roca del valle en el que se asienta. No es que sea poco, hay censados más de 800 monumentos en la antigua ciudad, la mayoría tumbas. La antigüedad de la mayoría de las construcciones nabateas data del período entre los siglos I a.C. y I d.C.
Os recomendamos totalmente ir a Petra, uno de esos lugares únicos que superó ampliamente nuestras expectativas. Cómo será, que Petra gusta incluso al viajero que menos disfruta de las visitas arqueológicas.
Principales monumentos en Petra
Los más destacados (es posible visitar mucho en un día) son:
- El Siq. Por lo que desciframos en nuestro viaje a Jordania, usan la palabra Siq en referencia a un desfiladero; sin embargo cuando escuches “el Siq”, es seguro que se está hablando del hermoso pasillo natural, de 1 kilómetro de longitud, que constituye el acceso principal a la Ciudad Rosada. El Siq es una maravilla en sí misma que ya merece la visita.
- El Tesoro (Al Khazneh). El Siq se estrecha en su tramo final y desemboca en la más bonita de las construcciones de la ciudad, El Tesoro.
- La Calle de las Fachadas contiene un gran número de tumbas de fachada en varios niveles.
- Teatro. De origen nabateo y reformado por los romanos tiene un hermoso aire rupestre-decadente.
- Las Tumbas Reales. Identificadas como las tumbas de varios de los reyes nabateos por su tamaño y detalle, aunque no hay ninguna certeza de que sea así.
- El centro de la ciudad antigua. La zona donde se construyeron los principales edificios públicos está bastante deteriorada pero da una idea de la magnitud de las edificaciones.
- El Monasterio (Ed-Deir). Es la fachada más grande de Petra, enorme, espectacular y perfectamente conservada.
- El Altar de los Sacrificios. En Petra los emplazamientos altos eran sagrados, en muchos de ellos se erigieron lugares de sacrificio, siendo éste el más importante. Da acceso al Wadi Farasa, una ruta realmente bella y recomendada.
Si quieres ir preparado en lo que a monumentos se refiere, no te pierdas este artículo.
¿Cuántos días para visitar Petra?
Este punto da mucho que hablar y es materia para un nuevo artículo. Creemos, que la fórmula tradicional de los viajes organizados de visitar Petra en un día es muy justa y no da para ver bien la ciudad, pero esto depende de cada uno. Según el tipo de viajero, nuestra recomendación es la siguiente:
- Un día, si es un viaje organizado o solo se está interesado en visitar los monumentos más importantes sin detenerse en detalle. La visita desde Amán, ida y vuelta el mismo día, da únicamente para verlo a la carrera.
- Dos días, para ver los principales monumentos con la atención que merecen y disfrutar de vistas y rutas fuera de las opciones más saturadas de gente.
- Tres días, para los más exigentes y enamorados de este tipo de viajes culturales. En Petra hay mucho que ver, ni siquiera en tres días se puede ver todo, pero da para una visita en detalle de los monumentos más destacados del valle. También para perderse por caminos poco transitados, en los que incluso, en nuestro caso, encontramos alfarería antigua medio enterrada por los caminos.
Es muy recomendable la visita a Petra de noche (Petra by Night), imprescindible diríamos. Eso sí, para lo que es, sale cara: 17 JD. A partir de las 20 horas, solo se podrá disfrutar los lunes, miércoles y jueves. Pregunta en el hotel para comprar la entrada, ellos se encargan de todo.
A tener en cuenta: Petra es para recorrer a pie y hay que caminar bastantes kilómetros. En este artículo te informamos de las rutas y tiempos promedio para recorrer el sitio arqueológico:
Según en qué área, se pueden alquilar carros, caballos, camellos e incluso burros para llegar a las zonas más altas o lejanas. Sin embargo, lo normal y lo más sensato es caminar, nosotros así lo hicimos. Tenlo en cuenta también a la hora de decidir el número de días, para ver lo esencial en un día hay que caminar un montón.
Lo que necesitas saber para tratar con los beduinos de Petra
Los habitantes locales, casi todos beduinos, son, en general, gente realmente insistente, hasta un extremo que puede rayar el cansancio. Muchos de ellos venden algo o conocen a alguien que lo vende: paseos en caballo, burro, camello o carruaje; comida, bebida, cualquier objeto de merchandising de Petra, pañuelos beduinos, subir a uno de los miradores del Tesoro, hacer de guía…
La lista de los productos y servicios que te ofrecerán es casi interminable, pero el número de veces que lo harán tenderá a infinito. Aunque no les hagas caso, no se dan por vencidos y si no hay mucha gente, es posible que te acompañen mientras caminas, intentando darte conversación y venderte algo; suele empezar con un Where are you from my friend?.
Los más insistentes de largo son los niños pequeños. Sí, en Petra verás muchos críos desperdigados por el sitio arqueológico, sobre todo en el Siq. Es muy triste ver a estos chavales intentando ganarse la vida, desde tan pequeños, cuando debieran de estar en el colegio o jugando. Recuerda esto al lidiar con ellos porque, aunque maleados, son niños y muy majetes, por cierto. El caso es que pronto verás que los niños de Petra van a saco para vender postales o subidas al mirador del Tesoro.
Tuvimos la fortuna de que en nuestra visita había poquísima gente en Petra. Fue muy bueno para ver los monumentos, pero a cambio tuvimos que hacer un máster acelerado en trato con los beduinos, que tenían pocos “clientes” para vender su amplia gama de productos.
El primer día, comenzamos saludando y diciendo no, gracias con una sonrisa, pero pronto vimos que no iba bien la cosa; había mucha gente buscándose la vida y, obviamente, no se conformaban con esta respuesta. Posteriormente hicimos el intento de no hacerles caso; ahí fallaron dos cosas: la primera, que no nos gusta ser así con la gente, y la segunda que les daba igual y seguían intentando la venta.
Al segundo día, decidimos cambiar de táctica a ver si nos resultaba mejor con la horda de vendedores. Pensamos que, ya que iban a seguirnos pues mejor entablar conversación con ellos. Resultó que, tras la fachada inicial de vendedores tenaces, había una gente con bastante sentido del humor, curiosidad y amabilidad. Muchos de ellos se alejaban cuando empezabas a preguntarles cosas, (objetivo cumplido); otros disfrutaban con la conversación (muy interesante e instructiva la mayoría de las veces), pero ya asumiendo que no ibas a comprar. Mientras hablabas con ellos, el resto no intentaban venderte nada. De esta manera pudimos afrontar más relajados los tramos con más vendedores.
Los beduinos nos sorprendieron gratamente; estuvimos charlando tranquilamente con varios, conversaciones de hasta un par de horas con los dueños de la tetería del mirador del Tesoro (seguramente el bar con mejores vistas del mundo).
El mundo beduino es otro, muy diferente al nuestro; nuestros puntos de vista tenían muy poco en común la mayoría de las veces (diferentes culturas y maneras de ver la vida), pero su hospitalidad fue legendaria.
Cuánto cuesta la entrada a Petra
Hay varias opciones para hacerse con una entrada a Petra:
- Si no se duerme al menos una noche en un hotel en Jordania, el precio es estratosférico: 90 JD.
- Lo normal es hacer varias noches en el país, en ese caso los precios son: 50 JD un día, 55 JD dos días y 60 JD tres días.
- Si vas a hacer más visitas, además de Petra, seguramente te interese hacerte con la Jordan Pass que también incluye el visado de entrada al país, además de un buen número de monumentos y atracciones. Hay tres modalidades, desde 70 a 80 JD. Una vez sepas qué vas a visitar, haz las cuentas para ver si te interesa la Jordan Pass. Nosotros nos hicimos con ella, realmente se ahorran algunos euros.
Horario de visitas en Petra
Petra abre a las 06:00 AM; en verano el cierre es a las 18:00, mientras que en invierno es a las 16:00. Lo que a nosotros nos pareció (y algún beduino nos confirmó) es que el horario que rige es el solar: Petra está abierta mientras hay luz.
Cuidado de no quedarse por la noche porque te pueden multar. Sin embargo, al menos a nosotros, nos ofrecieron dos lugareños diferentes actividades nocturnas dentro de la antigua ciudad… Lo que está claro, es que hay un buen número de beduinos que aún duerme en las tumbas de Petra, como pudimos ver madrugando mucho y estando en Petra a primera hora. Cuando la Ciudad Rosada entró en la lista del Patrimonio de la Humanidad en 1985, el estado jordano levantó un pueblo cercano para ellos. Aún así, aún hay beduinos que conservan el gusto por dormir en la antigua ciudad.
La historia de Petra
El redescubrimiento (por los occidentales) de Petra es una historia propia de Indiana Jones, y es que los beduinos guardaban celosamente su secreto. Te lo contamos todo en este artículo:
Dónde dormir
En el pueblo de Wadi Musa hay unos 50 hoteles, alguno tan alejado del centro de visitantes como 3 kilómetros. El hotel que nos dieron en la oferta cuando solicitamos presupuesto en agencia (antes de decidir que haríamos el viaje por nuestra cuenta), era muy bonito pero muy alejado del centro de visitantes (donde hay además restaurantes y bares para incluso tomar una cerveza). Si la situación también es un problema para ti, ten en cuenta este factor a la hora de reservar.
Elegimos el Petra Moon Hotel por varias razones. La más importante a la hora de la elección: está al lado del centro de visitantes del recinto arqueológico.
Además, es un coqueto hotel de 4 estrellas con muy buena relación calidad precio. La puntuación de los usuarios de Booking es de 9, el desayuno está bastante bien, en dos minutos caminando estás en Petra y tienen un bonito detalle en forma de cajita y comida para el viaje cuando te vas; en resumen, un hotel totalmente recomendable con un buen buffet y cerca de restaurantes. Reserva en este hotel en el siguiente enlace: Petra Moon Hotel.
Cuándo ir a Petra
Al igual que en el resto de Jordania, los veranos son largos y los inviernos cortos. Pero, ojo, no son infrecuentes las tormentas invernales con nieve e incluso carreteras cerradas durante días.
La mejor época para visitar la ciudad es en primavera, de marzo a mayo; también la más cara. Desde octubre a finales de noviembre también suele haber buen tiempo, siendo la segunda temporada alta.
Durante el verano, de junio a septiembre, las temperaturas suelen ser bastante elevadas por lo que es la temporada baja. Sin embargo, nosotros fuimos a principios de junio y no se estaba nada mal, con temperaturas en torno a los 30ºC. No encontramos mucha gente, pero también es verdad que era Ramadán.
Durante el invierno suele hacer frío, sobre todo al ponerse el sol, pero la ventaja es que Petra tiene muchos menos visitantes; también pocas horas de luz. La parte negativa es que se dan lluvias torrenciales cada cierto tiempo; por la especial orografía de la ciudad es potencialmente peligroso encontrarte en una de estas riadas. Para hacerse una idea de esta fuerza de la Naturaleza: un local nos aseguró que tras estas lluvias torrenciales salía con un detector de metales para encontrar las monedas y objetos antiguos que el agua removía y dejaba cerca de la superficie.
Cómo llegar a Petra
Situada en el sureste jordano, Petra está cercana a la frontera israelí. Lo normal es viajar a Petra desde Amán. Si es así, la empresa de autobuses JETT ofrece el servicio con varias frecuencias diarias desde K. Hussein St. Tarda unas tres horas con una parada en una tetería/tienda/restaurante. Lo normal es tomar el autobús a Petra a las 6:30 de la mañana; si la idea es volver a Amman, la vuelta suele hacerse a las 16:30. Luego, si vas y vuelves en el día, no deja mucho margen, unas 5 o 6 horas para ver Petra (totalmente insuficiente).
Son autobuses bastante cómodos orientados al turista aunque también iba algún beduino. Hay que pasar por la oficina para comprar el ticket el día antes o bien arriesgarse el mismo día del viaje. A Nosotros el billete de ida a Petra nos costó 11 JOD por cabeza; si se compra ida y vuelta hacen un pequeño descuento.
Si se viaja desde otro punto de Jordania, recomendamos buscar en JETBUS o bien en otro transporte público si se desea viajar barato. La otra opción es un conductor privado (muy común en Jordania) o bien alquilar un coche.
Qué necesito llevar
Si vas en invierno se requiere ropa de abrigo, algo cómodo y que se pueda guardar en la mochila fácilmente. Para el verano mejor vestir lo más corto posible, estamos en el desierto y según la fecha del viaje la temperatura puede ser muy alta.
Debido a la cantidad de kilómetros a patear a diario, recomendamos usar el calzado más cómodo posible. Nosotros utilizamos playeros de correr, transpiran, son ligeros y muy confortables. No recomendamos sandalias, ya que además de no ser un calzado recomendado para caminar kilómetros, estamos en el desierto y puede haber algún que otro animalillo.
Fundamental llevar crema solar, también un sombrero o gorra además de unas gafas de sol. En este caso es buena idea hacerse con un pañuelo beduino; no es casualidad que lo utilicen, es una buena solución para evitar recalentarse la cabeza con el sol. Que sepas que el pañuelo típico jordano es el rojo y blanco, mientras que los beduinos de Petra suelen llevar diferentes colores en la testa; además no lo anudan igual.
El agua es imprecindible, recomendamos llevar una o dos botellas para comenzar el día y después ir comprando agua fría en los diferentes bares y tenderetes que hay desperdigados por todo el recinto arqueológico. El agua oscila entre 1 y 1.5 JOD; una cocacola 1.5 o 2 JOD, todo depende de dónde se compre. Aunque hay muchos lugares para adquirir bebidas, conviene tener provisiones para las zonas menos concurridas.
Cámara de fotos, totalmente necesaria para uno de los lugares más fotogénicos del planeta.
Si se van a recorrer caminos poco transitados, como por ejemplo subir al altar de los sacrificios para bajar por el Wadi Farasa, recomendamos portear algo de fruta o galletas. ¿Para qué? Es muy sencillo: por si te entra la “pájara” con esos calores y, sobre todo, porque seguramente verás niños pequeños de condición muy humilde que te pedirán comida. Para nosotros no es nada, pero la sonrisa que estos niños regalan por una pieza de fruta es simplemente impagable. Si prefieres, puedes llevarles una libreta y lápices para colorear, triunfarás.
Dónde comer en Petra
Dentro del recinto arqueológico de Petra hay varias alternativas para disfrutar de una comida al aire libre:
- Picnic en Petra. Nuestra opción favorita, tanto que la hicimos los tres días que estuvimos en la ciudad antigua. Es fácil escoger un sitio con unas vistas espectaculares (abundan), tomar asiento y disfrutar de una comida inolvidable.
- Comidas frugales. Se puede comprar fruta, galletas, bebidas y helados en los puestos desperdigados por el valle. Muchos disponen de mesas en el exterior, algunos con unas vistas inolvidables. También el té negro que venden es digno de mención.
- Darse un homenaje. Al final de las ruinas del centro de Petra hay dos restaurantes muy cercanos entre sí y son los únicos que sirven comida cocinada. Ninguno de ellos incluye las bebidas en su menú:
- Crown Plaza Basin. Tiene una pinta tremenda con una terraza muy bonita. Comida bufé por 17 JOD.
- Nabatean Tent. Parecido al anterior pero en versión de menor lujo. A cambio es mucho más barato, 10 JOD.
Para la cena desaconsejamos ir a los establecimientos que están justo antes de salir del recinto arqueológico, en la zona de las taquillas: son para turistas, sin ningún encanto. Los días que pasamos en Wadi Musa cenamos en varios lugares cercanos al centro de visitantes. Os recomendamos dos restaurantes, ambos de comida tradicional muy rica y a precio razonable (para ser Jordania):
- My Mom´s Recipe restaurant. Es el restaurante más auténtico y tradicional de los dos. Cenamos dos platos principales con un entrante de humus tremendo; para el postre, unos dulces de Ramadán que tuvieron la cortesía de invitarnos. Pagamos 26 dinares jordanos (bebidas incluidas).
- The Oriental restaurant. Humus, musaka, carnes a la parrilla y bebidas por 28 dinares.
Si no se encuentra la cocina jordana fascinante, también hay bares con comida occidental por la zona.