Viena y Budapest son dos de las ciudades más imponentes de Europa. Es muy común visitar ambas a la vez, y como queremos que tu mayor preocupación sea la de disfrutar de ese viaje tan deseado, te explicamos cómo ir de una a otra de manera sencilla, barata y cómoda. ¡Allá vamos!
Planificar antes de viajar
En la planificación de un viaje es uno de los puntos más importantes y que más tiempo llevan al organizar nuestro viaje. Dependiendo del viaje vamos, con más o menos planificación pero siempre cerramos los traslados entre las estancias antes de viajar, así evitas sorpresas y rompederos de cabeza de última hora.
Aquí te vamos a mostrar las opciones más habituales de conectar Viena y Budapest (o viceversa).
Distancia entre Viena y Budapest
Estas dos monumentales ciudades están separadas por 250 kilómetros. Una distancia respetable en el día a día, pero muy asumible de viaje y que permite disfrutar de estas dos delicias: la señorial Viena y la animada Budapest.
Cómo ir de Viena a Budapest o de Budapest a Viena
Al final tú eliges la opción que más se adapte a tus necesidades, pero aquí te mostramos las opciones más comunes para hacer el trayecto. Ya te adelantamos que para nosotros el ganador es el tren, y fue el transporte que escogimos.
El tren: la opción más cómoda y rápida.
Sin duda es el medio de transporte más rápido y cómodo. En poco más de dos horas y media habrás conectado ambas ciudades.
¿Pero cuánto cuesta?
El precio, en gran medida, depende de la antelación con la que compres el billete. Suele oscilar entre los 20 y 30 €, por trayecto y persona. En Viena se toma en la estación central Wien Hbf y en Budapest la parada es Keleti.
Hay bastantes trenes a lo largo del día, incluso de madrugada, por lo que seguro alguno de ellos se adapta a tus necesidades.
Autobús: el más barato
A precio no le gana nadie pero no, no se puede tener todo en esta vida: no es la opción más rápida.
Pero tampoco es que sea una locura el tiempo de trayecto: ronda las 3 horas y media en condiciones normales de tráfico. Con salida en Viena en la estación central y en Budapest en la estación Népliget o Kelenföld.
El precio oscila entre los 9 y 25€, por trayecto y persona, dependiendo de la antelación con la que compres tu billete.
Avión: más caro y más tiempo. La peor opción
Sin duda el transporte menos económico y, además, el que más tiempo requiere. Es la opción menos utilizada de largo, aunque al final todo depende del gusto del consumidor.
Conclusiones
- Por comodidad y un precio relativamente asequible, para nosotros el tren es el ganador.
- Si prefieres ahorrarte unos eurillos el autobús será tu mejor opción.
- Y como para gustos se hicieron los colores, si prefieres gastar más dinero e invertir más tiempo porque tu placer es volar pues adelante, el avión es lo tuyo.
Qué hacer en Viena y Budapest
Te dejamos algunos planes y consejos para disfrutar de ambas ciudades a través de los artículos que ya tenemos escritos:
La Nochevieja en Viena y el Silvesterpfad, ¡un fin de año a la austriaca!
