Girona puede presumir del perfecto equilibrio entre mar y montaña por lo que ofrece experiencias para todos los gustos. Su fusión única de historia, paisaje y naturaleza convierten a la región en un destino más que recomendable en cualquier época del año.
Existen numerosas opciones de camping Cataluña y es que resulta una muy buena opción para visitar la región y disfrutar del entorno y el contacto con la naturaleza. Además de resultar una opción de alojamiento bastante más asequible que los hoteles u apartamentos turísticos, sobre todo en temporada alta, ofrece todas las comodidades necesarias y permiten desconectar de la rutina y disfrutar de la vida al aire libre.
Muchos campings de Cataluña cuentan con una ubicación privilegiada primera línea de mar o en parajes de gran riqueza natural, próximos a parques nacionales y lugares de interés turístico de primer nivel, por lo que son muy valorados por grupos de amigos, parejas o familias que desean sacar el máximo partido a su tiempo sin necesidad de grandes desplazamientos. Además, ofrecen la posibilidad de hacer muchas actividades al aire libre como rutas de senderismo o a caballo, excursiones, deportes acuáticos, etc.
Lloret de Mar es un municipio famoso por la belleza de sus playas mediterráneas. Esconde tesoros únicos como Los Jardines de Santa Clotilde ubicados sobre un impresionante acantilado por lo que ofrecen unas vistas impresionantes; la Iglesia de Sant Romà (1509) una joya del estilo gótico catalán; o el cementerio modernista. Existen numerosas opciones de camping en Lloret de Mar y en sus alrededores desde los que emprender alguno de los famosos Caminos de Ronda que recorren el litoral catalán. Una de las rutas más recomendables parte del Castillo d’en Platja hasta la Cala dels Frares. Es ideal para disfrutar de impresionantes vistas de la puesta del sol.
Los amantes de la historia disfrutarán descubriendo el rico patrimonio modernista que esconden sus bosques de encinas. Para ello no deben perderse la Ruta de las ermitas, un recorrido sencillo de unos 19km que se inicia en el Museo del Mar de Lloret de Mar.
La localidad es un destino idóneo también para los amantes de los deportes acuáticos. Su playa de Sa Boadella, destacada entre las mejores de Europa, ofrece aguas cristalinas perfectas para hacer snorkel.
El tramo final del río Ter acoge un extraordinario parque natural con tres zonas diferenciadas de dunas, humedales y lagunas. El macizo del Montgrí, con su castillo (1294) y los impresionantes acantilados; así como la zona marítima protegida más antigua de Catalunya, las Islas Medas. Un archipiélago formado por siete islas pequeñas y algunos islotes, que son un paraíso para los amantes del buceo y el snorkel.
Pero Girona no solo ofrece playas; quienes prefieran disfrutar de un relajante baño en medio de la naturaleza pueden visitar algunas de las espectaculares pozas naturales que acoge la región, como la preciosa Poza Azul, uno de los lugares más instagrameables de Girona, o las pozas de Maçanet de Cabreny, cuya roca gigantesca sirve de improvisado trampolín y solárium.
La gastronomía de Girona es otro de los alicientes que no deben faltar durante la escapada. Sus platos típicos mezcla de mar y montaña o sus productos típicos como las anchoas de La Escala o sus deliciosos embutidos artesanales: butifarra, salchichón, fuets, bull, bisbe o paltruc. Los más golosos disfrutarán saltándose la dieta con los célebres xuixos y panellets.
En definitiva, Girona cuenta con una belleza natural indiscutible que cada año atrae a viajeros de todo el planeta dispuestos a descubrir la variedad de atractivos y contrastes que ofrece la región.