Lejos del turismo de masas, el municipio de Felanitx invita a conocer la cara más auténtica de Mallorca. Más allá de sus calas de aguas turquesa, este rincón del sureste de la isla sorprende con rutas para recorrer a pie o en bici, bodegas con encanto, tradicionales almazaras y pueblos con historia y carácter.

Recomendamos Felanitx si quieres descubrir una Mallorca más tranquila y auténtica, lejos de los núcleos turísticos más concurridos. Las recomendaciones que encontrarás en este artículo están basadas en experiencias reales, pensadas para que puedas exprimir al máximo lo mucho que Felanitx y alrededores tiene para descubrir.
Contenido del artículo
Cuando visitar Felanitx
Como en casi toda Mallorca, la costa de Felanitx alcanza su mayor afluencia durante los meses de verano. No obstante, este encantador rincón del sureste mallorquín ha sabido conservar su esencia y evitar la masificación de otras zonas.

Si lo que buscas es tranquilidad sin renunciar al buen tiempo, los mejores momentos para descubrir Felanitx son los meses previos y posteriores al verano. Ya desde abril es posible disfrutar de los primeros baños en el mar; eso sí, ¡estará algo fría! Por su parte, septiembre y octubre ofrecen buenas temperaturas y un mar que conserva el calor estival.

Si lo tuyo es el cicloturismo y el objetivo es pedalear por carreteras panorámicas y desafiantes puertos de montaña, los meses de abril y mayo son óptimos para disfrutar del principal destino cicloturista europeo.
Cuantos días quedarse en Felanitx
Para una primera vez en Mallorca, este municipio puede ser una buena base de operaciones para conocer el este de la isla. Desde aquí, tendrás a tiro de piedra lugares tan emblemáticos como las cuevas del Drach o la fabulosa playa de Es Trenc. Es una zona tranquila, que encaja con un itinerario variado por Mallorca, y en 3 o 4 días tendrás tiempo suficiente para conocerla y hacer escapadas a los alrededores.
Por otro lado, si ya conoces la isla y esta vez buscas un lugar menos concurrido, con esencia local y un ambiente relajado, Felanitx es perfecta para una estancia más larga.
Qué ver y hacer en Felanitx
Felanitx sigue siendo uno de los tesoros mejor guardados de Mallorca. Lejos de las zonas más concurridas, ofrece una estancia rica en experiencias, cultura y autenticidad, sin renunciar al placer del sol y playa.
Las playas de Felanitx
Felanitx esconde calas de aguas cristalinas y tonos azules imposibles que nos volaron la cabeza… y tú también deberías descubrirlas.

Una de nuestras favoritas es Cala Sa Nau, situada a unos 10 km de Portocolom. La encontrarás en una zona natural y cuenta con chiringuito para refrescarse entre baño y baño. La vida pirata en su máxima expresión.

De cala Sa Nau parte un sendero que lleva hasta la cala Mitjana, más escondida y a la que solo se puede llegar a pie o en barco. No hay aparcamiento cerca, pero la caminata está justificada. Es una cala muy pequeña, rodeada de naturaleza por un lado y al otro, limitada por una propiedad privada que no le resta un ápice de encanto. Sus aguas son cristalinas y tranquilas. Nos encantó esta playa y fuera de temporada pudimos disfrutarla solos.

Si te alojas en Portocolom y te apetece un día de playa sin complicaciones, la playa de S’Arenal es una opción muy cómoda con chiringuito.

Y no podemos olvidarnos de Cala Marçal, un pequeño arenal muy cercano a Portocolom, con aguas increíblemente azules, arena dorada y chiringuito.
Enoturismo en Mallorca
Mallorca, por su ubicación y su clima privilegiado, es un excelente lugar para la producción de vinos. No es casualidad que la isla cuente con más de 70 bodegas y dos denominaciones de origen: Binissalem y Pla i Llevant.

Felanitx es tierra de viñedos y tradición vinícola. Su historia ligada al vino sigue muy viva, con bodegas que combinan el saber hacer de siempre con técnicas modernas y sostenibles.
La mejor manera de descubrir el alma de estos vinos es visitar alguna de las bodegas locales, donde se puede aprender mucho sobre las variedades de uva autóctonas, el proceso de elaboración y, por supuesto, disfrutar de una cata.

Nosotros tuvimos la oportunidad de visitar la bodega Es Fangar y fue una experiencia, transmitida con pasión, que recomendamos sin dudar. La visita terminó con la cata de cuatro de sus vinos… y sí, nos encantaron.
Oleoturismo en Mallorca
Basta recorrer unos pocos kilómetros por Mallorca para darse cuenta de que el olivo es parte del alma de esta isla. Con una población estimada de casi un millón de olivos, algunos centenarios, estos árboles no solo embellecen el paisaje con sus retorcidas formas, sino que también alimentan una de las tradiciones más arraigadas: la del aceite de oliva.

Con denominación de origen Oli de Mallorca, la mayor parte de su producción se destina al consumo local en Baleares, lo que hace que probarlo sea una experiencia aún más especial.

Visitar una almazara y hacer una cata de AOVE es casi parada obligatoria si quieres entender la esencia de Mallorca. Visitamos Son Mesquidassa que cuenta con unas instalaciones modernas y bonitas. La cata fue interesante e instructiva y la verdad que se pasó volando el tiempo. Si nunca has hecho una cata de aceite, te sorprenderá todo lo que puede contarte un sorbito de oro líquido.
Portocolom
Portocolom es una de las poblaciones más atractivas de la costa este de Mallorca. Con aire de pueblo pesquero tradicional, es un destino turístico consolidado, pero sin aglomeraciones y tranquilo, con coquetos hoteles, restaurantes y bares.

Es un pueblo que ha sabido conservar su encanto mallorquín entre barquitas, cobertizos marineros y un faro que preside la gran bahía natural donde se asienta. Estamos seguros de que si lo pruebas, no te querrás ir de Portocolom.
Dónde comer en Portocolom
La oferta gastronómica de Portocolom es amplia y variada. Por ubicación al lado del mar, calidad de la cocina y trato al cliente, te recomendamos dos lugares en los que vas a comer muy bien y deberías probar.
El restaurante del Barefoot Hotel ofrece una propuesta deliciosa y con productos frescos de mucha calidad. Se esmeran mucho en que estés a gusto y te hacen sentir en casa. La comida estaba realmente buena.

No se quedan atrás el Bocoi Portocolom, donde el servicio es excelente y sus arroces y fideuás estaban para chuparse los dedos.

Dónde alojarse en Portocolom
Si estás pensando en regalarte una estancia especial, El Hotel Barefoot Mallorca 5***** es lo que estás buscando. Al lado del mar, con SPA, un trato exquisito y habitaciones donde se cuida el más mínimo detalle, es el lugar para relajarse y disfrutar.

El desayuno merece una mención aparte, variedad y calidad. El Barefoot es uno de esos hoteles donde el lujo se vive con calma y buen gusto.
Santuari de Sant Salvador
El Santuario Mare de Déu de Sant Salvador atrae por igual a devotos, ciclistas y amantes de las panorámicas. Desde sus 509 metros sobre el nivel del mar se tienen unas vistas inigualables a la costa, al Pla de Mallorca, la sierra de la Tramuntana, el castillo de Santueri e incluso, en los días claros, Cabrera y Menorca asoman por el horizonte.

Su origen se remonta al siglo XIV y actualmente el santuario lo conforman la iglesia, una pequeña capilla y el monumento a Cristo Rey, todos más recientes.

Dónde alojarse en Sant Salvador
Dormir en lo alto de la montaña es posible y, además, muy recomendable. El antiguo monasterio ha sido cuidadosamente rehabilitado y convertido en un alojamiento con muchísimo encanto, el Petit Hotel Sant Salvador 3***.

Situado en un lugar privilegiado, todas sus habitaciones tienen vistas al mar. Ver el amanecer desde la cama es, literalmente un espectáculo. El hotel es sobrio, acorde al lugar, pero muy cómodo y el trato exquisito del personal deja huella. El restaurante, muy pintoresco, fue todo un descubrimiento donde cenamos muy muy bien a base de tapas.
El Castillo de Santueri
El castillo de Santueri se alza en una cima a 408 metros de altitud, ofreciendo unas vistas panorámicas sensacionales. Desde su ubicación privilegiada, se divisa a la perfección el mar y la isla, por lo que no es difícil imaginar por qué este enclave fue utilizado como refugio desde tiempos remotos.

Aunque su origen es antiguo, el castillo ha tenido varias vidas, y desde el siglo XIX pertenece a un particular. Actualmente, se puede visitar su interior en determinadas épocas del año. Es posible unir en una ruta de unos 4 kilómetros (solo ida) el Santuario de Sant Salvador con el castillo de Santueri, que nosotros hicimos.

Closos de Ca’n Gaià
El yacimiento arqueológico de los Closos de Ca’n Gaià se encuentra muy cerca de Portocolom, tanto que puedes llegar caminando sin ningún problema. Este lugar nos transporta a la Edad de Bronce, hace unos 3.000 años, y conserva vestigios de la cultura naviforme, característica de la época en Baleares.

Se visita siguiendo un itinerario llano de 450 metros de recorrido que cuenta con paneles interpretativos que te ayudan a entender cómo vivían las antiguas comunidades de la isla, milenios atrás.
Ruta por las canteras de Sa Mola
El marés es una roca sedimentaria característica de las islas Baleares, utilizada extensivamente en la construcción de edificios, como la Catedral de Mallorca. Justo al lado de Felanitx se pueden visitar varias canteras de marés, desperdigadas por el pequeño promontorio que ocupa.

Se trata de una ruta circular corta y fácil de unos 4 kilómetros, que recorre varias cuevas semiocultas en la vegetación. Lo que tienen de especial son las estructuras y formas singulares, creadas por la mano del hombre al extraer los bloques de marés. Un paseo que nos sorprendió gratamente. Es un lugar tranquilo y de una belleza extraña e intensa.
Felanitx y su mercado de los domingos
Felanitx es un lugar espectacular para disfrutar del auténtico ambiente mallorquín. Con una larga tradición vinícola, el centro guarda calles empedradas, arquitectura tradicional y una buena oferta de restaurantes y bares. No dejes de visitar la iglesia de Sant Miquel.

El mercado dominical de Felanitx, frecuentado por locales y turistas, llena el centro del pueblo con puestos de producto local, artesanía y vida. El ambiente animado lo convierten en un plan redondo para la mañana del domingo.
Si buscas algo diferente y estás interesado en el arte, puedes visitar el taller de Andreu Maimó en Felanitx. Este artista, aparte de ser una persona cercana y entrañable domina un abanico de técnicas y, entre otras cosas, es un maestro de la litografía y xilografía, apta para todos los bolsillos.

Dónde comer en Felanitx
En el restaurante Xino Xano encontrarás comida tradicional mallorquina y mediterránea en un ambiente local y acogedor. El trato es cercano y amable, y es posible escoger entre menú del día o carta. Aquí todo sabe a casa, por lo que es difícil equivocarse.

Dónde alojarse en Felanitx
A solo 6 km de Felanitx y 10 km de Portocolom, el Aumallia Hotel & Spa 4**** es un verdadero remanso de paz rodeado de naturaleza. Este alojamiento rural cuenta con piscina al aire libre, SPA con piscina cubierta, baño turco y sauna, además de unas habitaciones decoradas con mucho gusto y mimo. El jardín, el desayuno y los innumerables detalles, hacen del Aumalia un acierto si buscas tranquilidad y confort.
